domingo, 29 de diciembre de 2013

Una engañosa fácil forma de morir. Bucear en cuevas no tiene que se peligroso

La FGE nos remite enlace a un video de espeleobuceo, con origen en Manuel Ouro, en el que se explican los riesgos del espeleobuceo y las precauciones a adoptar. La NSS-CDS deja claros los peligros de bucear en cuevas sin entrenamiento adecuado.

Después de visualizar dicho video, simplemente señalar lo muy acertado del enfoque que se le ha dado, plasmando de una forma sencilla, clara y directa la problemática en cuanto a seguridad de la práctica del espeleobuceo.

Licencias deportivas FGE 2014


Esta disponible toda la información de las licencias 2014 de la FGE, disponible aquí.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Últimas noticias espeleología

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martes, 24 de diciembre de 2013

Antirroces.: Nuevas tencologías y diseños

Recientemente he participado en la exploración de una sima nueva en la Serra Enciña da Lastra en compañía de un grupo de los que suelo llamar dinosaurios de la espeleología gallega. En concreto, de la recién bautizada por A. Somoza, del E.C. Casteret, como Sima del Canal. Más adelante traeremos al blog información sobre dicha exploración, así como el correspondiente reportaje fotográfico, etc.


En las exploraciones de dicha sima, así como de otras dos próximas, hemos puesto en práctica el uso de nuevos materiales en tareas de antirroces. Es lo que hemos bautizado como antirroces-coca-cola.


(* Fotografía.: A. Somoza del E.C. Casteret)

jueves, 12 de diciembre de 2013

Ruta de Pena Guímara PRG-139 (Vilardíaz, Lugo)

Esta ruta pasa a formar parte de ese pequeño grupo que conforman las mejores y más completas rutas de Galicia para hacer con niños. Una maravilla 4 estrellas, muy variada, y con todo lo necesario para pasar un día en la naturaleza. El inicio de la ruta se localiza en las proximidades del pueblo de Vilardíaz, en la provincia de Lugo, en tierras de Fonsagrada.

Ruta circular que supone un total de 10 kms. En nuestro caso, al llevar un grupo variado de pequeños, desde los 5 a los 11 años, hacemos 6 kms. en total. Luego un par de adultos se meten otros 2 kms. por el coche para recoger a la "tropa" pequeña. Según tiempos y el estado de los niños planificar en su totalidad (10 kms.) o cortar a los 6 kms. Ruta impracticable con niños si está nevada. En algunos puntos el sendero discurre a cierta altura, por lo que los niños participantes deberán estar acostumbrados a caminar y se deberán tomar, por parte de los adultos, las medidas de seguridad oportunas. Un nuestro caso un adulto acompaña en semi-paralelo a los más pequeños. En varios tramos, como mecanismo de protección, la ruta presenta vallas de madera.

Poco antes de llegar a Vilardíaz, viniendo de Vega de Logares, veremos una gran escuela, abandonada, a la izquierda. También un par de carteles informativos de la ruta. Aparcaremos el coche en este punto, zona de inicio del sendero de Pena Guímara, ruta PRG-139. La ruta queda definida en el siguiente fichero kmz para google-earth y el correspondiente mapa.


Ver Ruta de Pena Guímara (Vilardíaz, Lugo) en un mapa más grande

Los pequeños no pueden resistirse a entrar en el patio del colegio, en el que, entre maleza, se encuentran con columpios, toboganes y campos de fútbol. Por las ventanas vemos que todavía cuelgan en las paredes los trabajos de los niños. Ahora este gran edificio esta en silencio, esperando a que la maleza de buena cuenta de sus paredes. Pero hoy los niños vuelven a correr por sus alrededores, tal y como algún día aconteciese.



Cruzando la carretera a la altura del colegio vemos un cartel informativo de la ruta y una señal de inicio de sendero, en continuo descenso en los primeros tramos.


Tal y como será la tónica del recorrido, el bosque empieza a jugar con nuestros sentidos, especialmente con la vista. 


En todo momento andamos sobre una alfombra de hojas, un sendero casi siempre cubierto y decorado con toda una gama de colores, desde el amarillo, pasando por los naranjas y terminando con los marrones.


En los primeros tramos nos encontramos con varias pequeñas cuevas (Cuevas de Vilardíaz). Es zona de caliza. Como era de esperar los pequeños no se resisten a explorar alguna de ellas. Se deberá planificar la ruta para un día completo. Aunque son 10 kms., o 6 kms. si se hace parcialmente, la variedad de cosas a hacer hará que las horas se acumulen fácilmente.  


Seguimos nuestro sendero, siempre descendiendo, con todo tipo de ejemplares de árboles.


Estamos en diciembre, buena época para visitar la zona, siempre bien abrigados. En los tramos de sombra, el hielo y la escarcha aplican su manto blanco sobre el sendero.


Atravesamos distintas zonas boscosas, por un sendero bien marcado y sin pérdida posible.


Las familias de setas cubren el margen del camino. Faltan lo enanos.


Un castaño partido a la mitad les llama la atención. 


En otros tramos el bosque deja pasar los rayos del sol.


Entramos en un tramo en el que las hojas han cubierto el sendero y tenemos que agudizar los sentidos para poder localizar nuestro camino. Le explicamos a alguno de los pequeños que nos acompañan que dos marcas de pintura en paralelo indican la ruta a seguir, y una cruz, camino equivocado. La tropilla juega a buscar las marcas y a descubrir el camino. Ruta perfectamente señalizada. 


Siempre sobre una alfombra multicolor.


No todo es bajar. Pronto nos vemos subiendo alguna pequeña rampa. Las piernas empiezan a calentar. En unas zonas predomina el naranja-marrón.


Y en otras el verde.


Y siguiendo sendero llegamos a la Iglesia de San Martín de Robledo.


En una grieta de su arco de acceso al atrio un murciélago descansa. Un pequeño propone sacarlo de su morada. Aprovechamos para hablarles de estos animales, de sus enormes beneficios y, entre otras cosas, de que estamos ante un animal protegido. Además son nuestros compañeros de cuevas en las actividades espeleológicas. Después de la charla-chapa, quedó claro que de incordiarle nada de nada. 


El arco de acceso a su atrio presenta una grieta que apunta a un futuro poco prometedor en el caso de que no se tomen las medidas arquitectónicas, o simplemente de reparación, oportunas. Nuestro querido patrimonio, siempre en continuo peligro. Un 1% de todo el dinero que se ha "chorizado" en los últimos años en este país seguro que hubiese sido suficiente para tener la totalidad de nuestro patrimonio en perfecto estado de conservación. Pero bueno, no dejamos de ser una especie animal bastante peculiar. 


Desde el atrio una pequeña ventana nos permite ver el bosque.


Y por un pequeño agujero de la puerta podemos admirar el interior de la iglesia.


Al lado de la iglesia una gran casa deshabitada, posiblemente rectoral. Su puerta principal presenta un curioso escudo de 1804.



Entramos en el pueblo de San Martín de Robledo, donde cogeremos un desvío a la derecha para descender por camino hacia el pueblo de Romeán. Un nuevo desvío a la derecha, por una pasarela de madera, nos llevará a dicha localidad.



Romeán es uno de los muchos pueblos deshabitados existentes en Galicia. Ahora todos nos amontonamos en las ciudades. Nos hemos vuelto "homo modernis". Evolución o involución. El tiempo lo dirá. El esqueleto de un hórreo nos deja ver que este pueblo tuvo mucha vida.


Más arriba disfrutamos con la visión de otro hórreo en buen estado de conservación.


Y, como se haría antaño, nos damos un paseo por las calles de Romeán. No, no nos cruzamos con ningún vecino, no los tiene.



En el caso de que participen niños pequeños en esta ruta, menores de 5-6 años, este es un buen punto para que ellos finalicen aquí su ruta. El siguiente tramo es más duro y complejo, por lo que los participantes deberán estar acostumbrados a caminar por el monte. Desde Romeán volvemos unos pocos metros sobre nuestros pasos al desvío señalizado, para continuar por nuestra ruta hacia las Foces A Pinguela del río Veiga de Logares. Sin duda alguna, este tramo es el más espectacular y bonito de toda la ruta. Iniciamos nuestro camino con diversas subidas y bajadas, siempre siguiendo el margen del río Veiga de Logares.


Todo tipo de pequeños saltos de agua nos acompañarán durante varios kilómetros.



En diversos puntos se localizan vallas de madera para proteger la progresión.


En otros puntos el sendero discurre a cierta altura sobre el nivel del río. Siempre tomad las medidas de seguridad oportunas, especialmente con los más pequeños.


Sorprendente, unas veces pinos, otras castaños, o hayedos.


Subimos y bajamos, parecemos la prima de riesgo, ese invento neocapitalista desarrollado para pegarle el palo a algunos países. Unas veces nos alejamos del río, y otras descendemos para hacerle compañía.


En algunos tramos el sendero presenta algo de piedra suelta. Buena superficie para que los pequeños aprendan a caminar sobre todo tipo de terreno, algo que les será muy útil en sus vidas. En estas zonas aparecen los resbalones. Es bueno que aprendan a levantarse después de una caída. Un buen calzado es fundamental, así como una buena compañía. Las hojas, el hielo, y la piedra suelta, en algunas ocasiones en senderos con un cierto desnivel, los pondrá a prueba.


Siempre en fila india. Todos luchan por ser el primero. Pero, primero, ¿para qué?, si todos llegarán al mismo destino.


Las vallas de madera son de gran ayuda en algunos tramos de descenso.


Y en otros constituyen unos miradores espectaculares. Aquí los árboles si dejan ver el bosque.


No te responde en tu idioma, aunque si te habla, y dice muchas cosas. De momento con que aprendas a respetarlo y cuidarlo es suficiente.


Algunas duras subidas requieren el uso de las manos, y también de la cabeza.


Pero después de un tramo duro, siempre viene uno relajado, tranquilo, en compañía del río. Es como la vida misma.


No es bueno amontonarse. Vive y deja vivir.


Así mejor, con espacio vital. Para montones ya tenemos nuestras ciudades.


Aparecen las primeras señales de cansancio. Es hora de buscar un lugar para que los pequeños coman y se hidraten.


Siempre buscando nuestro camino, duro camino. Saltamos el muro o lo rodeamos.


Los viejos castaños siempre nos acompañan. Ellos saben mucho.



Nuevas vallas de madera protegen las zonas de mayor caída. La ruta está muy bien cuidada.


Venga, que os dejamos atrás!!. Los PIGs se quedan rezagados, no comprenden las prisas por llegar antes a ninguna parte.


Un sendero siempre espectacular. Una auténtica maravilla de la naturaleza.




En algunos tramos el hielo hace su aparición. Debemos caminar con calma y cuidado para evitar resbalones. El hielo del norte siempre poniéndonos trampas en el camino. Pero nosotros también sabemos movernos en este tipo de superficies, aunque prefiramos los ambientes cálidos.



Unas mesas y bancos de piedra, al sol, constituyen un lugar único para descansar, comer, etc. Todo apunta a que no queda mucho de nuestra ruta.


Después de una zona abierta, en la que entran los rayos del sol, sol del sur de Europa, volvemos a introducirnos en el bosque, siguiendo el sendero.




En otro tramo de subida, las formaciones en hielo les traen recuerdos de sus actividades de espeleología.


Una bajada, un giro a la izquierda, para en una última subida llegar a una carretera asfalta.


Foto de familia en dicho punto. No estamos todos, pero sabemos lo que queremos.


Desde el inicio de ruta hasta este punto, cruce con la carretera, hemos recorrido 6 kms., hemos visto bosques, todo tipo de ejemplares de árboles, setas, cuevas, iglesias, pueblos deshabitados, cascadas, ríos, molinos, y un montón de maravillas de esta encantadora tierra. Estos 6 kms. nos ha supuesto un total de 3,5 horas, con calma, y disfrutando de todo lo que nos encontrábamos.

En este punto, si cogemos la carretera a la derecha, se podría enlazar con sendero a la izquierda para continuar, durante otros 4 kms., el resto de la ruta. En nuestro caso, contando con el cansancio de la tropa, mientras esperan, dos adultos cogen carretera a la izquierda, siempre en continuo ascenso, hasta el pueblo de Villardíaz. En 30 minutos estamos en el coche, listos para volver a recoger al resto de participantes en esta actividad.

Durante el fin de semana que pasamos en la zona nos alojamos en una casa de turismo rural en el pequeño pero encantador pueblo de Braña. Esta localidad tiene dos casas de turismo rural encantadoras, con una relación calidad-precio muy buena. Un saludo a los propietarios de las mismas, por el magnífico trato y por disponer de unas magníficas instalaciones de turismo rural.

- Casoa de Braña (http://www.casoadebrana.com/)
- Casa do Cabo (http://www.casadocabo.com/)

Localización de dichas casas de turismo rural en el fichero kmz para google-earth y en el siguiente mapa (enlaces a las páginas de web de las mismas accesibles desde los mapas).


Ver Turismo Rural en A Braña (Lugo) en un mapa más grande

En esta zona existen otras muchas rutas y actividades que se pueden hacer. Tendremos que volver pronto para recorrer alguna de ellas. A 40 kms. también tenemos la costa, con posibilidades de playas, etc. También hace frontera con la zona de los Oscos, en Asturias, con otras posibilidades. O podemos acercarnos a Fonsagrada, por ejemplo a hacer la ruta de la Seimeira de Vilagocende, o a Taramundi. Cerca de Taramundi también tenemos el museo de molinos más grande de España, el de Mazonovo (http://www.mazonovo.es), en el que los niños podrán disfrutar haciendo harina con todo tipo de molinos. 


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