En esta entrada se incluyen algunos lugares de interés a visitar en una de las zonas de descenso de cañones en Galicia, concretamente la zona de las localidades de Melón, O Casal, Serra y Ribadavia, en la provincia de Orense.
►Fotografía del Monasterio de Melón
►Fotografía Hórreos y Cruceiros de Serra
En la provincia de Orense, en la autovía Orense-Vigo, se encuentran, muy próximas entre sí, estas localidades. Melón es un pequeño pueblo que forma parte del conjunto de lugares de Galicia en los que, cada vez que los visito, me encuentro como en casa. Sin duda alguna, estamos en una de esas zonas en las que se percibe una gran cultura en todos y cada uno de sus habitantes.
En agosto, especialmente la primera semana, Ribadavia te puede sorprender con todo un despliegue de talleres de comic, artesanía, pintura en la calle, etc.; por la tarde, encontrarte saboreando un ribeiro en una terrada con un concierto de jazz; continuar con un concierto de fusión; y terminar la noche con uno de “hardcore”. Al día siguiente, cambiarte al pequeño pueblo de Melón, y ser sorprendido por un concierto de un magnífico bajista teniendo como escenario de actuación el monasterio, amenizado por la creación en directo de un cuadro del entorno.
Como es lógico, el arte y, en general, la cultura, es un fenómeno contagioso, y en esta zona este hecho se percibe con claridad. Recordar que estamos en la zona del ribeiro, no seas “melón” y disfruta de este magnífico vino, hay muchos y variados. No todo en Galicia es albariño, ni mucho menos, y podrás disfrutar de ribeiros que no tienen nada que envidiar a ninguno de los mejores albariños.
Pero bueno, ¿qué podemos ver en esta zona?. Antes de nada, para los amantes de los descensos de cañones, tienes tres muy próximos en la zona (Tourón o Cerves Superior, Cerves Inferior y Cortella). Si no eres “cañonista”, o eres de esos “cañonistas” que complementan su actividad con la historia, arquitectura, etc. de los lugares que visita, entre otros cosas te recomiendo.:
El principal encanto de Melón está en sus gentes y, desde el punto de vista arquitectónico, en su monasterio, accesible al visitante libremente. Cuídalo y respétalo para que todos podamos disfrutar del mismo. Encontrarás muchos arcos y techos soportados por columnas de hierro y soportes para evitar su degradación. Sin duda alguna es una buena medida a la espera de fondos que permitan su reconstrucción. No te olvides de ver el palomar del monasterio.
En verano también te recomendamos la zona llamada “Pozas de Melón”. Su bar-terraza es ideal para disfrutar de una cerveza. Un saludo a los jóvenes que llevan este bar, por su amabilidad y trato. En el 2008 se estaba haciendo una piscina en esta zona, que me imagino se podrá disfrutar en el 2009. De todas formas, a pocos metros tienes el río Cervevs, con infinidad de pequeños saltos de agua, y unas magníficas pozas para darte un chapuzón. No hagas el “pinza” y disfruta, sin correr riesgos.
Si eres un amante de las cascadas, aunque no practiques nuestro deporte, también puedes visitar un pequeño tramo del descenso del Cerves Superior, lo que te recomiendo. En la carretera principal de Melón, justo donde está el monasterio, encontrarás un desvío que tiene un cartel “Cascadas de Tourón”, que te cruzará por encima de la autovía. Continuar por la principal dejando un desvío a derecha. Llegarás a un punto en el que te encuentras una señal que pone cascadas. Deja el coche en esta zona y coge el sendero de tierra que desciende a la derecha (sale de la señal que pone cascadas). El camino te lleva al cauce. Podrás bañarte en alguna de sus pozas y verás un par de magníficas cascadas. Tener mucho cuidado en el punto de llegada del camino al río, especialmente si vas con niños. Te encuentras una gran poza a izquierda y una zona amplia de roca a derecha (mirando hacia el río), que puede estar mojada. Este punto ha dado un buen montón de accidentes. Esta zona que puede parecer no reviste peligro alguno, requiere tener mucha precaución y cuidado en el caso de que decidas cruzar al río o andar por esta zona del cauce. Si se produce un resbalón en la zona después de la poza (muy resbaladiza), lo más probable es la de “toboganear” por una amplia y poco pendiente rampa que, tras un buen montón de metros, se precipita en una cascada vertical. En caso de producirse este incidente las consecuencias pueden ser muy graves. Extrema las precauciones y disfruta del paraje. Un poco más arriba podrás ver una cascada de 37 metros y, si lo deseas, darte un chapuzón en su poza de recepción.
En O Casal y Serra, pueblos muy pequeñitos, a los que llegarás en 5 minutos de coche cogiendo desde Melón dirección a Ribadavía (por la carretera nacional, no por la autovía), encontrarás una espectacular concentración de hórreos y cruceiros. Muy recomendable. No estaría mal soterrar alguna de las líneas de tensión de esta zona.
Sobre Ribadavia, sobran las palabras, o mejor dicho, no perderé tiempo en buscar palabras que definan esta localidad. De todas ellas es la más grande con diferencia. Dispone de alojamientos, bares, restaurantes, etc., etc. ¿Qué ver en Ribadavia?. Piérdete por sus calles. Habla con sus gentes. Métete en todos sus bares a disfrutar de un ribeiro (siempre y cuando no tengas que conducir). Y de arquitectura, un magnífico casco viejo, castillo, judería, etc., etc. Más información en http://www.ribadavia.com/
Hay muchos más lugares y visitas recomendables en la zona, por ejemplo a alguna de sus bodegas, pero a fin de cuentas estás en una página dedicada al descenso de cañones, y no al turismo. Si quieres más información, visita la oficina de turismo de Ribadavia. Finalmente, recuerda que esta zona está bastante libre de estrés. Tómate la vida con calma, y procura disfrutar, entre otras formas, dejando pasar el tiempo sentado en una escalera a la sombra y charlando, a ser posible con alguien que te supere en edad y, por lo tanto, posiblemente en conocimientos y experiencias.
►Fotografía del Monasterio de Melón
►Fotografía Hórreos y Cruceiros de Serra
En la provincia de Orense, en la autovía Orense-Vigo, se encuentran, muy próximas entre sí, estas localidades. Melón es un pequeño pueblo que forma parte del conjunto de lugares de Galicia en los que, cada vez que los visito, me encuentro como en casa. Sin duda alguna, estamos en una de esas zonas en las que se percibe una gran cultura en todos y cada uno de sus habitantes.
En agosto, especialmente la primera semana, Ribadavia te puede sorprender con todo un despliegue de talleres de comic, artesanía, pintura en la calle, etc.; por la tarde, encontrarte saboreando un ribeiro en una terrada con un concierto de jazz; continuar con un concierto de fusión; y terminar la noche con uno de “hardcore”. Al día siguiente, cambiarte al pequeño pueblo de Melón, y ser sorprendido por un concierto de un magnífico bajista teniendo como escenario de actuación el monasterio, amenizado por la creación en directo de un cuadro del entorno.
Como es lógico, el arte y, en general, la cultura, es un fenómeno contagioso, y en esta zona este hecho se percibe con claridad. Recordar que estamos en la zona del ribeiro, no seas “melón” y disfruta de este magnífico vino, hay muchos y variados. No todo en Galicia es albariño, ni mucho menos, y podrás disfrutar de ribeiros que no tienen nada que envidiar a ninguno de los mejores albariños.
Pero bueno, ¿qué podemos ver en esta zona?. Antes de nada, para los amantes de los descensos de cañones, tienes tres muy próximos en la zona (Tourón o Cerves Superior, Cerves Inferior y Cortella). Si no eres “cañonista”, o eres de esos “cañonistas” que complementan su actividad con la historia, arquitectura, etc. de los lugares que visita, entre otros cosas te recomiendo.:
El principal encanto de Melón está en sus gentes y, desde el punto de vista arquitectónico, en su monasterio, accesible al visitante libremente. Cuídalo y respétalo para que todos podamos disfrutar del mismo. Encontrarás muchos arcos y techos soportados por columnas de hierro y soportes para evitar su degradación. Sin duda alguna es una buena medida a la espera de fondos que permitan su reconstrucción. No te olvides de ver el palomar del monasterio.
En verano también te recomendamos la zona llamada “Pozas de Melón”. Su bar-terraza es ideal para disfrutar de una cerveza. Un saludo a los jóvenes que llevan este bar, por su amabilidad y trato. En el 2008 se estaba haciendo una piscina en esta zona, que me imagino se podrá disfrutar en el 2009. De todas formas, a pocos metros tienes el río Cervevs, con infinidad de pequeños saltos de agua, y unas magníficas pozas para darte un chapuzón. No hagas el “pinza” y disfruta, sin correr riesgos.
Si eres un amante de las cascadas, aunque no practiques nuestro deporte, también puedes visitar un pequeño tramo del descenso del Cerves Superior, lo que te recomiendo. En la carretera principal de Melón, justo donde está el monasterio, encontrarás un desvío que tiene un cartel “Cascadas de Tourón”, que te cruzará por encima de la autovía. Continuar por la principal dejando un desvío a derecha. Llegarás a un punto en el que te encuentras una señal que pone cascadas. Deja el coche en esta zona y coge el sendero de tierra que desciende a la derecha (sale de la señal que pone cascadas). El camino te lleva al cauce. Podrás bañarte en alguna de sus pozas y verás un par de magníficas cascadas. Tener mucho cuidado en el punto de llegada del camino al río, especialmente si vas con niños. Te encuentras una gran poza a izquierda y una zona amplia de roca a derecha (mirando hacia el río), que puede estar mojada. Este punto ha dado un buen montón de accidentes. Esta zona que puede parecer no reviste peligro alguno, requiere tener mucha precaución y cuidado en el caso de que decidas cruzar al río o andar por esta zona del cauce. Si se produce un resbalón en la zona después de la poza (muy resbaladiza), lo más probable es la de “toboganear” por una amplia y poco pendiente rampa que, tras un buen montón de metros, se precipita en una cascada vertical. En caso de producirse este incidente las consecuencias pueden ser muy graves. Extrema las precauciones y disfruta del paraje. Un poco más arriba podrás ver una cascada de 37 metros y, si lo deseas, darte un chapuzón en su poza de recepción.
En O Casal y Serra, pueblos muy pequeñitos, a los que llegarás en 5 minutos de coche cogiendo desde Melón dirección a Ribadavía (por la carretera nacional, no por la autovía), encontrarás una espectacular concentración de hórreos y cruceiros. Muy recomendable. No estaría mal soterrar alguna de las líneas de tensión de esta zona.
Sobre Ribadavia, sobran las palabras, o mejor dicho, no perderé tiempo en buscar palabras que definan esta localidad. De todas ellas es la más grande con diferencia. Dispone de alojamientos, bares, restaurantes, etc., etc. ¿Qué ver en Ribadavia?. Piérdete por sus calles. Habla con sus gentes. Métete en todos sus bares a disfrutar de un ribeiro (siempre y cuando no tengas que conducir). Y de arquitectura, un magnífico casco viejo, castillo, judería, etc., etc. Más información en http://www.ribadavia.com/
Hay muchos más lugares y visitas recomendables en la zona, por ejemplo a alguna de sus bodegas, pero a fin de cuentas estás en una página dedicada al descenso de cañones, y no al turismo. Si quieres más información, visita la oficina de turismo de Ribadavia. Finalmente, recuerda que esta zona está bastante libre de estrés. Tómate la vida con calma, y procura disfrutar, entre otras formas, dejando pasar el tiempo sentado en una escalera a la sombra y charlando, a ser posible con alguien que te supere en edad y, por lo tanto, posiblemente en conocimientos y experiencias.
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