En los últimos meses hemos oído muchas noticias referentes al pago en las autovías del norte de Portugal. Todo apunta a que pasarán a ser de pago a partir del próximo 15 de octubre (noticia aquí). Una mala noticia que afecta, en primera instancia, a nuestros colegas ecedecianos de Portugal, así como al resto de habitantes del país vecino y, en segundo, a los que solemos visitarlos. Ufff, pagar por hacer montaña y cañones, pagar por circular por todas partes, etc., etc. Señalar que tampoco es muy diferente a lo que tenemos aquí en Galicia, todo el eje Ferrol - Coruña - Santiago - Pontevedra - Vigo, y Santiago - Orense, son autopistas de pago, y las autovías son casi inexistentes (la A6, con los correspondientes impuestos revolucionarios de entrada en Coruña, y poco más). Bueno, tampoco hablaremos de la cantábrica de unión con Asturias, que debería estar completamente en funcionamiento el siglo pasado.
Sin duda alguna, otra mala noticia para nuestras cada vez más quebradas economías. Como siempre, se inauguran las autovías vendiéndonos los grandes logros políticos y lo bien que gestionan los impuestos y, al poco, a volver a pagar.
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