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Ver Carril bici y ruta O Burgo-Cecebre (A Coruña) en un mapa más grande
El primer tramo, que se inicia en las proximidades del Puente que une A Coruña con Santa Cristina, es un carril bici que recorre la ría del Burgo. En este tramo te encontrarás grandes zonas verdes, varias instalaciones de juego con columpios, campos de fútbol y baloncesto, bares, cafeterías, restaurantes, etc., etc. Es una zona ideal tanto para los pequeños que todavía utilizan "ruedines", así como de pista escuela para que den sus primeros pasos sobre dos ruedas. En estos casos, se recomienda buscar días en los que el carril no esté masificado. Cuando los niños empiezan a andar sin "ruedines", hasta que alcanzan unas mínimas destrezas en bicicleta, este carril es ideal. Señalar que en una zona de la pista existen unos puentes con unas barandillas enormes. Hasta que no se maneje mínimamente mejor evitarlos por la derecho o izquierda. Me viene a la cabeza cierto pequeño que salió de uno de esos abajo de cabeza con la bici detrás. No estaría mal unas barreras en la parte baja de protección para evitar que otros pequeños puedan volar. Por lo demás, todo perfecto y muy recomendable. Este primer tramo finaliza en el puente del Burgo, zona del paraguas, antes de cruzar la carretera AC-211. Hasta este punto el carril no toca en ningún sitio con carretera alguna. Son unos cuantos kilómetros para que los niños puedan disfrutar de las dos ruedas.
En la siguiente, abandonamos los "ruedines".
Este tramo en fotografías lo podemos resumir en las siguientes. En primer lugar en la zona que solemos utilizar de inicio de ruta, en un aparcamiento de una de las urbanizaciones próximas al carril bici y a la ría del Burgo.
En la siguiente descendiendo desde el aparcamiento al carril bici. Son poco más de 50 metros.
Entrada al carril bici. Cogemos a la derecha.
Pronto nos encontramos el primer parque, con una tirolina, columpios, toboganes, etc. Mejor dejarlo para la vuelta, cuando están más cansados.
Y a los pocos metros unas instalaciones para hacer piruetas en dos ruedes. Es pronto para ellos. Todo llegará.
El carril sigue su ruta por un entono muy bonito, con jardines, y siempre con la ría a nuestra izquierda. Esa ría de la que tanto oímos hablar, sobre su saneamiento y no saneamiento, pero de la que vemos que pasan los años, y no mejora todo lo que nos gustaría.
Y llegamos a los puentes de los que hacíamos referencia al principio de la entrada. Una diversión para los niños, siempre y cuando no marchen de cabeza de alguno de ellos. En caso de que no mantengan bien el equilibrio y la línea recta, mejor que los pasen por un lado. Como primeros pasos en BTT pueden servir.
También vemos instalaciones deportivas de acceso al público. Campos de fútbol y baloncesto.
Seguimos nuestra ruta por el carril bici.
Un circo nos sale al paso. En esta zona llegamos a una carretera, en el puente del Burgo. Es el final del primer tramo de la ruta. En ningún momento de este primer tramo hemos atravesado carretera alguna.
El segundo tramo empieza en el puente de O Burgo. Al final del primer tramo tendremos que cruzar una carretera por paso de peatones. Hay mucho tráfico. Con cuidado. En la siguiente fotografía el inicio del segundo tramo, justo después de cruzar la carretera próxima al "puente romano".
Al final de la urbanización cruzaremos la ría por un puente de madera, a su margen derecho. Veremos un "colgado" en el mismo.
Un pequeño tramo entre naves, con todo tipo de pintadas, por camino de tierra.
Ahora tenemos unos cuantos metros al margen de la carretera, tras un "quitamiedos" para, en la parte alta, abandonar la carretera y volver a circular por camino de tierra. Cuidado con que algún niño se coma alguno de los postes de la barrera de protección, esas que tan poco gustan a los moteros, y tampoco a los ciclistas.
Pronto volvemos a circular por camino de tierra, lejos de los coches.
Tras un largo recorrido, encontramos uno de los varios cruces que tenemos con carreteras. Con cuidado y controlando a los pequeños. Mejor que un adulto pase las bicis y cruzar caminando con los niños.
Volvemos a los caminos de tierra.
Entre casas. Algunas clásicas.
Y otras modernas.
Entre árboles.
Llegamos a un cruce con otra carretera. Una fábrica al fondo. En este punto cruzaremos el puente sobre la ría a su margen izquierdo. Existen barreras de protección en el puente.
Luego bajamos al camino y pasamos por debajo del puente de la carretera. En esta zona veremos un gran molino habitado.
Y más camino lejos de los coches.
Esta zona, más alejada de la ciudad, es la más bonita de todo el recorrido.
Encontraremos otra carretera que tendremos que cruzar. No disponemos de fotografías de este punto. Está en una curva y, aunque tiene paso de peatones, creemos que es la zona más peligrosa. Los coches pasan a demasiada velocidad, y es habitual que algunos ni se percatan de la existencia del paso de peatones. Mucho cuidado con los pequeños en este punto. Al respecto, señalar que un ciclista no es un peatón, por lo que siendo puristas, puede que no tengamos tanta prioridad en dicho paso en el caso de ir circulando sobre la bicicleta.
Luego seguiremos tranquilos por camino de tierra.
En la siguiente llegando a otro cruce de carretera. Por puente cambiaremos de margen de la ría.
Un cartel con mapa informaba en su día de la ruta, punto de localización, etc. En la actualidad las pintadas hacen que sea imposible vislumbrar información alguna. Sería preferible quitarlos, antes de verlos en tal estado. Recuerdo una viaje que hicimos a Eslovenia. Los carteles informativos de muchas de sus zonas eran cuadros de óleo sobre madera. Una maravilla. Además, a nadie se le ocurría ponerles la más mínima muesca encima.
Seguimos nuestro camino por las sendas, siempre paralelas al río.
Con otro cruce de carretera. Este con muy poco tráfico (carretera secundaria).
Mirad antes de cruzar.
Y llegamos al final del segundo tramo, en la base de la presa del embalse de Cecebre. Aquí decidimos darnos la vuelta.
Volvemos sobre nuestros pasos.
De regreso paramos en la zona del gran molino.
A pocos metros del molino, río arriba, dirección al embalse de Cecebre, una zona de baño. Unos árboles con escalones y cuerdas permiten a los niños hacer un poco el tarzán.
Después de la aventura por los árboles, seguimos en nuestras bicicletas.
De regreso a la civilización. !!Civilización!!. Si está todo lleno de pintadas y demás destrozos!!.
Paramos en el primer parque, le seguirán otros muchos.
Nos llama la atención una de las farolas del paseo de la zona civilizada. El cristal tiene un agujero. Al acercarnos, descubrimos una "obra de arte" - Mensaje en una botella, botella en una farola.
Un carruaje de caballos con una pareja de novios circula próximo al carril bici. Aquí te encontrarás varias terrazas y cafeterías, por si queréis reponer fuerzas.
Al final del trayecto, el más pequeño de los participantes, que disfruta con su cuentakilómetros, nos avanza que ha batido su "record" de distancia hasta la fecha, por encima de los 32 kilómetros.
El tercer tramo no lo recomendamos para los más pequeños, al circular en varios puntos por carreteras que, aunque tienen muy poco tráfico, lo tiene. Es el tramo que rodea el embalse de Cecebre. Más adelante será el momento de hacer este tercer tramo.
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