Desfiladero de las Xanas (Santo Adriano-Asturias)

Ruta totalmente recomendable. Un total, ida y vuelta, de 6 kms., 3 de continua subida ligera y otros 3 de retorno en descenso. Aunque es una ruta factible para niños, no es adecuada para que jueguen al pilla-pilla o similares. Gran parte de la ruta discurre por un sendero con caída al desfiladero de las Xanas, por lo que juegos y niños fuera de control en absoluto. Según los niños que participen en la actividad, evaluar su viabilidad y, en todo momento, tomar las medidas de seguridad oportunas.

Estamos en un clásico de nuestro deporte principal, el descenso de cañones, aunque en la actualidad este descenso, como otras muchas actividades en Asturias, está totalmente prohibido. Hubo un tiempo, hace muchos años, antes de la fiebre del turismo rural, que todos los años visitábamos tierras asturianas en varias ocasiones para practicar el descenso de barrancos y la espeleología. Después llego el turismo, y con él, las prohibiciones casi generalizadas de muchas de nuestras actividades clásicas. Ahora, después de un montonazo de años sin pisar estas maravillosas tierras, hemos decidido volver. Son varios los amigos, buenos amigos, que tenemos por estas tierras, y se merecen todo lo bueno posible, especialmente en estas épocas de crisis.

Las Xanas es una ruta que no tiene dificultad física, aunque sí mucho encanto estético, así como muchos recuerdos, buenos recuerdos. Pero antes de nada, para el que desconozca este paraje, aquí os dejo el fichero kmz para google-earth del Desfiladero de las Xanas.
 

Ver Una vez posicionados en la ruta, nada mejor que algunas fotografías.

En la siguiente en los inicios de la ruta.

El sendero se estrecha y gana en espectacularidad.

Siempre subiendo, ligeros, pero subiendo. 

Jugamos con los pasamanos del camino.

El otoño ha cubierto el suelo. 

El agua baja libre, sin restricciones ni prohibiciones.

Las cabeceras del descenso siguen en su sitio, parabolts y cordinos. !!Qué recuerdos!!

Los pequeños miran el río. El agua baja libre, aunque ellos es muy posible que nunca puedan bajar este barranco en libertad. Prohibir no es un estado natural, mejor regular y proteger. La prohibición absoluta no es un adecuado mecanismo de protección. El ser humano forma parte de la naturaleza. De hecho, al igual que los ríos, también somos mayoritariamente agua. 

Lo único que pueden hacer es descender esos pocos metros que, sin ayuda de cuerdas y arneses, les proporcione una visión fugaz del descenso. Tal vez algún día cambien las cosas. 

El camino sigue, aunque sería preferible cambiarlo por el rugir del agua. 

Los túneles de la ruta nos sirven de meta. Pronto de regreso al punto de partida.

 

Esperamos algún día poder volver, con los pequeños, pero para descender las Xanas, con nuestros neoprenos y arneses. Adoramos estos entornos acuáticos y, por encima de todo, queremos verlos en perfecto estado de conservación. Ahora no los vemos, esperemos en un futuro si poder hacerlo, obviamente, asumiendo todo tipo de solicitudes de permisos, restricciones de participantes, restricciones temporales, etc.

►Audiovisual con las fotografías de la actividad aquí
 

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